Según un informe del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP), si se invirtiera anualmente, hasta el 2050, el 2% del PIB mundial en los que la ONU apunta como los 'diez sectores clave', la huella ecológica se reduciría en un 50%.
En el informe también se destaca el papel de la economía verde como catalizador del crecimiento, no solo para las economías más desarrolladas, sino también como instrumento de erradicación de la pobreza en los países en vías de desarrollo, donde casi el 90% del PIB generado en estas poblaciones procede de la naturaleza.
En la actualidad, entre el 1 y el 2% del PIB mundial se invierten en subsidios y subvenciones que perpetúan una utilización no duradera de los recursos, que participan de la degradación del medioambiente, como son las ayudas destinadas a combustibles fósiles (más de 650.000 millones de dólares al año) o a la pesca (unos 27.000 millones de dólares anuales). Según precisa el informe, "si se invirtiera cerca del 1,25 por ciento del PIB mundial anual en la eficacia energética y en las energías renovables disminuiría la demanda mundial de energía primaria en un 9 por ciento en 2020 y cerca de un 40 por ciento en 2050".
Los beneficios
En este documento se concluye que, si se consiguiera dicha transición hacia la economía verde, aparte de reducirse la huella ecológica en un 50%, se obtendrían ingresos por habitante mayores a los que generan los modelos económicos actuales. Además, en materia de empleo, precisa que "con el tiempo, el número de empleos nuevos y dignos creados en los sectores que van desde las energías renovables a una agricultura duradera compensará la pérdida de aquellos generados por la economía sucia".
Desde la ONU se apuesta por el desarrollo de políticas públicas innovadoras, como marcos reglamentarios que estimulen los sectores económicos verdes, una tasación que desplace los gastos de los consumidores y aliente la innovación o inversiones públicas en formación, para establecer unas condiciones favorables hacia una economía sotenible. Por otra parte, sugiere que la mayor parte de la inversión debiera ser asumida por lainiciativa privada.
Fuentes: Fundación Entorno, Ethic, UNEP.
No hay comentarios:
Publicar un comentario